Historia clínica nutricional: qué es, cómo se hace y ejemplos

La historia clínica nutricional es una herramienta esencial para el nutricionista. Permite hacer un seguimiento de la ingesta dietética y los progresos de los pacientes. A continuación, te mostraremos qué es una historia clínica nutricional, su función y algunos ejemplos.

¿Qué es la historia clínica nutricional?

La historia clínica nutricional es una herramienta que se utiliza para documentar la ingesta dietética, el estado nutricional y la salud general de un paciente. La información de estos registros puede utilizarse para determinar si un paciente necesita hacer algún cambio en su dieta, o si necesita ser derivado para una evaluación adicional.

Este tipo de historiales son documentos que ayudan a médicos, enfermeras y otros profesionales sanitarios a llevar un seguimiento del estado nutricional de sus pacientes. Es decir, no son de uso exclusivo de nutricionistas, aunque estos profesionales son los que más lo usan.

Este historial nutricional es una forma de registrar toda la información necesaria para crear una imagen de cómo los hábitos alimentarios de una persona afectan a su salud, lo que puede ayudar a detectar problemas y aportar soluciones.

La historia clínica nutricional es un proceso continuo que implica:

  • Evaluar la historia y el estado actual del paciente.
  • Revisar los análisis de laboratorio, los estudios de imagen y otras pruebas diagnósticas.
  • Identificar posibles problemas o patologías.
  • Interpretar los resultados de estas evaluaciones para determinar la mejor manera de abordarlas.

Las historias clínicas online también pueden usarse para comunicarse con otros médicos o profesionales sanitarios y compartir información sobre el estado nutricional de su paciente.

¿Para qué sirven las historias clínicas en nutrición?

Los historiales médicos nutricionales suelen utilizarse junto con otras pruebas y exámenes para ayudar a identificar problemas como la desnutrición o la falta de determinados nutrientes en el organismo.

El objetivo de estos historiales es proporcionar información sobre la salud alimenticia del paciente y poder relacionarlas con las patologías presentadas para poder tomar medidas al respecto. Por ejemplo, si no estás ingiriendo suficiente hierro en tu dieta, esta información le permitiría al profesional añadir más alimentos ricos en hierro a tu dieta.

Los historiales médicos nutricionales tienen muchas ventajas, como ayudar a los médicos a determinar qué cambios dietéticos pueden ser necesarios para que los pacientes reciban el tratamiento adecuado para sus dolencias.

¿Cómo hacer una historia clínica nutricional?

La mejor forma de crear historiales clínicos nutricionales es a través de plantillas y formularios prediseñados como los que puedes encontrar a través de los software para nutricionistas. Estos formularios los llena el nutricionista con los datos del paciente evaluado.

Pasos para crear una historia clínica en nutrición:

  1. Primero se llenan los datos del paciente. Datos como estatura, peso, edad, sexo, a qué se dedica, rutina diaria, entre otros.
  2. El nutricionista comienza con preguntas abiertas sobre lo que el paciente come y bebe a diario, así como también sobre cualquier restricción o preferencia dietética. Esto ayudará a conocer mejor sus hábitos alimentarios y a calibrar hasta qué punto está dispuesto a introducir cambios en su dieta.
  3. Habría que realizar preguntas por los hábitos de ejercicio o actividad física. Qué deportes practica, la cantidad de días y horas a la semana dedicadas al ejercicio, entre otros.
  4. De igual forma, habría que preguntar por los síntomas que experimenta el paciente, como problemas digestivos o cambios de humor que puedan estar relacionados con la ingesta de alimentos. A menudo, las personas experimentan problemas digestivos sin darse cuenta de que se debe a algo que han comido, por lo que este es un aspecto importante para obtener toda la información requerida.
  5. A continuación, hay que señalar los medicamentos o tratamiento que tiene el paciente, incluidos los de venta libre, los recetados, los suplementos, las vitaminas, etc. Estos productos pueden interactuar entre sí, por lo que es importante que los médicos estén al tanto de todo lo que pueda afectar a la salud de una persona por los diferentes tratamientos que consume.
  6. También es conveniente anotar los antecedentes familiares. Si existe o no algún tipo de enfermedad como diabetes, problemas cardíacos, en sus familiares directos.
  7. Por último, debe hablar de otros factores de riesgo, como el tabaquismo o el consumo de alcohol, que puedan afectar al estado nutricional del paciente, ya que estos factores pueden influir en la eficacia de su plan de tratamiento.

Con toda esta información, el nutricionista ya tiene una buena base de datos para tomar decisiones sobre la dieta y rutina que necesita implementar el paciente.

Ejemplo de historia clínica nutricional de un paciente

Como ya lo mencionamos, la mejor manera de crear los historiales clínicos nutricionales es a través de plantillas prediseñadas con todos los datos que se necesitan del paciente y que el nutricionista rellenará en la consulta.

Estas plantillas se pueden imprimir y llenar a mano si así lo desea el nutricionista, aunque también lo puede hacer de manera digital en el programa de edición de la plantilla.

Otra opción es utilizar un software gestión clínica que permita la creación de historiales médicos. Docfav es un software que se adapta perfectamente a los requerimientos de nutricionistas y permite crear historiales clínicos nutricionales directamente en la nube a través de formularios y plantillas.

Incluso podrá cargar información de estudios externos, imágenes, dietas creadas y mucho más. Docfav presenta una demo gratuita para todos aquellos profesionales que quieran probar la plataforma antes de realizar cualquier pago. Basta con entrar al sitio web y realizar la solicitud.

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Iñigo Ardanza